La viceprefecta del Gobierno de la provincia de Pichincha, Marcela Costales, en su condición de profesional de la etnología, fue recibida en la Comisión de Derechos Colectivos, donde expuso sus criterios en torno al pedido de declaratoria de interés nacional la explotación de los bloques 43 y 31.La experta comentó que dicha declaratoria debe priorizar el respeto a la vida humana, el desarrollo de los pueblos y una explotación responsable que permita obtener recursos económicos para combatir la pobreza.
Recomendaciones
Consideró que a los grupos denominados en alistamiento se los debería calificar como pueblos ocultos, al tiempo de recomendar la necesidad de establecer un equipo científico técnico del más alto nivel con la participación activa de etnólogos y por miembros del pueblo Huaorani, hermanos de sangre y raíz de los no contactados, quienes tienen pleno conocimiento de sus costumbres y su forma de ver el mundo.
En este equipo también se puede aprovechar la experiencia de los grandes misioneros capuchinos que hicieron una obra extraordinaria, al contrario de lo que hizo el Instituto Lingüístico de Verano, que fue responsable de la desaparición de los Huaoranis, siempre con la visión del imperio, agregó.
Asimismo, propuso ampliar el colchón de amortiguamiento, tomando en cuenta que tales pueblos nómadas no conocen de fronteras vivas; hay que darles la posibilidad de desplazamiento y crear mecanismos de avistamiento respaldados científicamente – vía satelital-.
Es fundamental trabajar con las petroleras en la creación de protocolos para una situación de encuentro con pueblos no contactado, a fin de superar posibles conflictos; definir la presencia de una brigada médica permanente que maneje igualmente esos protocolos, concluyó.
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