El evento, organizado en cooperación con la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte, forma parte de los esfuerzos de la UIP para reforzar el rol de los parlamentos en la promoción y protección de los derechos humanos.
La mesa redonda tiene como objetivos promover una mejor comprensión de las tendencias regionales y mundiales hacia la abolición de la pena de muerte; compartir enseñanzas, a través de la presentación de estudios de casos nacionales y el debate sobre las iniciativas nacionales exitosas para revocar la pena de muerte y el rol jugado a este respecto por los parlamentos y sus miembros; e, identificar las oportunidades legales y políticas, en particular para la participación parlamentaria, así como las dificultades encontradas en los países que están avanzando hacia la abolición
De acuerdo con las Naciones Unidas, unos 150 países han eliminado la pena de muerte o no realizan ejecuciones. La abolición es apoyada por Estados de todas las regiones del mundo, sin importar el sistema político, la religión, la cultura o la tradición.
Según los organizadores, el liderazgo de los parlamentarios es necesario para abordar las inquietudes del público relativas a la eliminación de la pena capital y para promover la legislación nacional para abolir la pena capital y ratificar los tratados de derechos humanos que restringen su uso o abolirla en la legislación.
Los parlamentarios y expertos que trabajan directamente en la promoción de la abolición de la pena de muerte harán la presentación sobre los tres grandes objetivos de la mesa redonda, que serán seguidos de un debate.
PV