El Pleno de la Asamblea Nacional inició el primer debate del proyecto de Ley Orgánica de Libertad e Igualdad Religiosa que tiene por objetivo garantizar y proteger el ejercicio de los derechos de las personas a practicar, conservar, profesar o cambiar su religión o creencia religiosa; así como, garantizar la pluralidad y tolerancia a las prácticas religiosas, de conformidad con los principios de libertad e igualdad; establecer las potestades, competencias y obligaciones de las entidades religiosas, en el marco de los derechos establecidos en la Constitución, tratados, pactos y convenios internacionales.
Indicó que en el Exministerio de Gobierno, Policía y Cultos, al 2010, se registraron 2 860 entidades religiosas, sin embargo, en el país existen aproximadamente 6 980 iglesias, de las cuales 4 700 son evangélicas.
Entre otros aspectos, el proyecto norma el ejercicio de los derechos de libertad e igualdad religiosa, estableciendo las bases operativas e institucionales para su vigencia; garantiza la libre práctica religiosa en igualdad de condiciones y oportunidades, aseguró.
La iniciativa respeta la autonomía de las entidades religiosas; establece las bases jurídicas para la regularización de las entidades religiosas, con absoluto respeto a su doctrina y autonomía institucional; norma la constitución del Consejo Nacional de Libertad e Igualdad Religiosa, protegiendo la diversidad religiosa mediante la inclusión, valoración, afirmación y el diálogo entre todas ellas.
Igualmente, reconoce la personalidad jurídica de las entidades religiosas por parte del Estado ecuatoriano; el ejercicio libre de su ministerio; certifica a las autoridades, guías o ministros de culto para el ejercicio de capellanías; determina el registro público de las entidades religiosas a nivel nacional.
En la continuación de la sesión 145 del Pleno, los asambleístas escucharon los planteamientos, que sobre esta temática dieron el Monseñor Luis Cabrera Herrera, Vicepresidente de la Conferencia Episcopal, quien considera que el proyecto de ley es bueno y contiene aspectos positivos, y de parte de la Iglesia Católica dijo que no existe el afán de conseguir ningún privilegio, pero que es necesario profundizar sobre el carácter público y privado de las entidades religiosas.
Al referirse al Consejo de Libertad establecido en este cuerpo legal, dijo que violenta la constitución de un estado laico, lo cual constituiría un retroceso histórico, por lo que pidió se elimine este artículo.
De su lado, Fernando Muñoz, de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, indicó que la libertad religiosa es un derecho humano fundamental, por ello, en la normativa que estudia la Asamblea se debe establecer claramente los principios que rijan y respeten la libertad de cultos.
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