El tema territorial es bastante polémico, que engloba la distribución de poder en el territorio; para el caso colombiano es la distribución de poder en su vasta geografía, desequilibrada y excluyente con la periferia, que, por lo demás, es un término absolutamente peyorativo, opinó Liliana Estupiñán, de la Universidad del Rosario de Colombia.
Durante el Simposio Nacional de Desarrollo Urbano y Planificación Territorial, que se cumple en la Universidad de Cuenca, la experta sostuvo que no se puede hablar de un modelo territorial o una forma de Estado perse, perfecta, ya que todos los modelos territoriales se cruzan y combinan.
Habló que la forma de Estado o de los estados unitarios en América Latina lleva, necesariamente, a pensar, desde la perspectiva comparada, en las siguientes expresiones: imitación, imposición, trasplante, mestizaje, es decir, se construye en un ámbito complejo, al insistir que en el continente se siente que el paradigma es y sigue siendo Francia, afortunada o desafortunadamente.
Recordó que la mayoría de pueblos latinoamericanos adoptaron, después de la descolonización, como modelo un estado unitario, el cual ha pasado por intensas transformaciones y ajustes, tras expresar que la tendencia mundial es la descentralización, bajo planes concretos que apuntalen el progreso de los pueblos y satisfagan las expectativas de la gente.
Experiencia chilena
Mientras, Claudia Rodríguez, del Ministerio de Bienes Nacionales de Chile, informó que desde 1933 la organización político – administrativa es unitaria y centralizada, además que la descentralización se ha relacionado con los diversos modelos de desarrollo económico imperantes en el país a lo largo del tiempo.
Así, ha pasado por la sustitución de importaciones (1933-1973), en que se otorgó especial importancia al desarrollo de la industria nacional, buscando alternativas al centro del país–Santiago- para su localización; el Libre Mercado y Doctrina de Seguridad Nacional (1974-1989), que produjo mezcla y confusiones entre criterios de eficiencia con la seguridad; y, en la etapa del retorno a la democracia se concibe la descentralización como un medio para promover la democracia a través de la participación ciudadana y el avance local, expresó.
Mayor importancia
En la conferencia 3 sobre la articulación de la planificación del desarrollo y del ordenamiento territorial, también intervino Alberto Costa Lopes, del IBAM de Brasil, quien manifestó que a partir de 2003, durante la presidencia de Ignacio Lula da Silva, se profundizó el análisis de la temática. Acotó que si bien no tienen un plan nacional para el territorio, hay una mirada importante de cómo manejar el territorio para la gente, al tiempo de argumentar que está para aprobación el Plan Nacional de Ordenamiento Territorial de Brasil. No obstante, mantienen una política nacional de ordenamiento territorial (PNOT), de zonificación ecológica económica, zonificación ecológica económica costera, a las que se suman unidades de conservación y programas de contingencia ante posibles derrames de petróleo.
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