Con 85 votos, el Pleno de la Asamblea Nacional exhortó al presidente de la República, Rafael Correa Delgado, incluya al Hospital Docente “Ambato” en el Decreto Ejecutivo 618, de 10 de enero de 2011, que declara el estado de excepción sanitaria en todas las unidades operativas del Ministerio de Salud, considerando que este centro asistencial no cuenta con loa parámetros necesarios para una adecuada atención médica a la ciudadanía en general y, sobre todo, a los habitantes de esta jurisdicción.
En este marco, se solicita que atienda en forma urgente sus requerimientos de infraestructura, equipos, personal administrativo, médicos y enfermeras, así como también se dote de las medicinas e insumos indispensables para su adecuado funcionamiento.
Juan Carlos López, representante de la provincia de Tungurahua, autor del proyecto de resolución, subrayó que el Hospital Docente entró a funcionar desde 1965, cuya estructura y capacidad está diseñada para 20 años de servicio. Por ello, dado el paso del tiempo, esta casa de salud ha cumplido su vida útil y necesita un cambio, tanto en su infraestructura, cuanto en la dotación de equipos.
Aseguró que el número de habitantes creció y, con ello, se incrementaron también las necesidades del hospital, por lo que en la actualidad sus instalaciones resultan pequeñas, en relación con la gran demanda existente.
Explicó que hasta el 2010 contaba con 69 médicos residentes, 147 enfermeras y 10 médicos de especialidad, atendiendo a cerca de 500 pacientes diarios; y, según el informe anual, a la sala de emergencias acudieron 75 mil 388 pacientes ; en consulta externa, fueron atendidos 91 mil 638 pacientes, sin que se haya incrementado el número de facultativos, lo cual obliga a que los ciudadanos sean atendidos en centros privados de salud, así como a comprar sus propias medicinas, lo que contraría el principio de gratuidad de la salud, establecido en la Constitución.
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