Los asambleístas Jorge Escala y Cléver Jiménez presentaron el proyecto de Ley de Seguridad para las Personas que Realizan el Trabajo Doméstico y Trabajadoras por Cuenta Propia, preparado por
El proyecto tiene como objetivo fijar los principios para la seguridad social de las personas que realizan el trabajo doméstico y para las mujeres trabajadoras por cuenta propia urbanas y campesinas, a quienes garantiza el derecho a la salud, la asistencia médica, la protección de los medios de subsistencia y los servicios sociales necesarios para el buen vivir.
En la propuesta se destaca que el trabajo no remunerado que se realiza en los hogares, conocido como tareas domésticas, conforman un conjunto de actividades heterogéneas, que se desarrollan para garantizar procesos vitales de la sociedad en su conjunto.
Se advierte que estas actividades son desarrolladas por mujeres, incluso desde temprana edad y que el tiempo que implica la ejecución de este trabajo, representa una doble jornada de trabajo, que implica el desgaste físico y mental de quienes lo ejecutan.
La propuesta establece el sistema de seguridad social para este segmento de la población, el mismo que comprenderá un régimen de seguridad social y uno de asistencia social.
El Régimen de Seguridad Social ofrecerá protección en los casos de enfermedad, maternidad, paternidad, riesgos de trabajo, cesantía, desempleo, vejez, invalidez, discapacidad y muerte, mientras que el de Asistencia Social protegerá, especialmente, a las adultas mayores; a las personas que no tienen condiciones físicas y/o mentales para trabajar; y, en general, a todas aquellas personas cuyas necesidades esenciales no estén aseguradas, o que, por sus condiciones de vida o de salud, requieran protección y no puedan solucionar sus dificultades sin ayuda del Estado.
Este seguro, según el proyecto, cubrirá a todas las personas que tengan a su cargo el trabajo familiar no remunerado en el hogar; a las jefas de familia y madres solteras con dificultades económicas para satisfacer las necesidades fundamentales de hijas e hijos y personas que estén bajo su responsabilidad; a las beneficiarias con el bono de desarrollo humano; las trabajadoras por cuenta propia urbanas y rurales.
Las prestaciones de seguridad social serán de servicio de asistencia médica, curativa, hospitalaria general y especializada; los medicamentos y alimentación cuando se encuentren hospitalizadas; los aparatos de ortopedia y prótesis; el subsidio por enfermedad o accidente o por desempleo; pensiones de invalidez total o parcial, por vejez, por montepío; préstamos quirografarios e hipotecarios.
De acuerdo con la propuesta, estos seguros estarán financiados en su totalidad por el Estado.
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