El presidente de la Asamblea Nacional, Fernando Cordero Cueva, se entrevistó con Philip Alston, relator de la Organización de Naciones Unidas, ONU, para temas de Ejecuciones Extrajudiciales, con el propósito de intercambiar criterios sobre este tipo de actos, que conmueven a la ciudadanía.
Cordero Cueva, tras dar la bienvenida al ilustre visitante, subrayó que conoce cuán delicadas resultan las funciones de un cargo como este, sobre todo para velar por el respeto irrestricto a los derechos humanos de todas las personas, en los cinco continentes.
En este marco, expresó su preocupación por ciertos hechos que se han dado en el Ecuador, con la aplicación del sistema de justicia indígena, reconocida en la Constitución, por tratarse de un país intercultural y plurinacional. “Vemos con sorpresa que, a pretexto del ejercicio de una cultura ancestral, empiezan a existir evidentes violaciones a los derechos humanos y hasta se llegó a anunciar, ventajosamente no pasó del anuncio, de que una comunidad iba a imponer la pena de muerte a un grupo de personas que, a su juicio, habría cometido una violación”.
Considero que el ejercicio de derechos colectivos garantizados en la Constitución no puede, de ninguna manera, vulnerar los derechos humanos, he ahí la aparente contradicción que se presenta al respecto, de allí que se requiere la intervención de la ONU para no perder ninguno de los derechos de las comunidades indígenas, pero también, para impedir que se violenten los derechos humanos, dijo.
De su lado, el relator de la ONU, Philip Alston, agradecido la invitación del Gobierno del Ecuador para visitar este país y conocer los problemas que se presentan, específicamente en lo que tiene que ver con las ejecuciones extrajudiciales, entendidas como tales, todas las muertes de personas a manos de diversos actores, en circunstancias inexplicadas, que muchas veces el Estado las investiga y otras no.
Explicó que el Relator rinde informe al Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Su función específica se orienta a tratar de ser constructivo y formular recomendaciones a las instancias de gobierno para que tomen acciones sobre los temas que estudia. Reiteró que su mandato tiene que ver directamente con las ejecuciones extrajudiciales.
Indicó que está familiarizado con el debate sobre la aplicación de la justicia indígena. No obstante, cree necesario prohibir toda clase de ejecuciones extrajudiciales, incluyendo toda muerte que se trate de justificar invocando las culturas indígenas, ya que como parte de su labor debe velar por la aplicación del derecho internacional. Por consiguiente, lo óptimo es encontrar un justo equilibrio entre la prohibición de las ejecuciones arbitrarias y el respeto de las culturas ancestrales, aseveró.
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