El presidente de la Asamblea Nacional, Fernando Cordero Cueva, expresó su absoluta satisfacción, al evaluar el desarrollo del foro: “Una Ley de Comunicación Democrática”, considerando que si bien nació de la Legislatura esa iniciativa, la organización la asumió una universidad prestigiosa, como la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, Flacso.
Si los foros sirven para que podamos recuperar opinión ciudadana, sugerencias, recomendaciones y críticas, también, se ha cumplido el objetivo, añadió, al enfatizar que se ha eliminado la duda de que era una especie de show para hacer creer a la gente que se incorporarán cambios cuando existe un texto para votar, sin analizar la apertura que ha demostrado constantemente el ponente Mauro Andino.
Cordero subrayó que este tipo de encuentros posibilitan conocer el pensamiento de otras voces que no han sido tomadas en cuenta, tras reiterar que la próxima semana se prevé realizar un foro en Guayaquil, liderado por los medios públicos, luego, otro que sería transmitido por televisión.
Recordó que la ley define, con total claridad, las reglas para el funcionamiento de los medios públicos, desechando ciertos miedos en los funcionarios públicos de hacer inversiones en éstos, creyendo que la Contraloría –mañana- les va a fastidiar.
Destacó que los foros permitirán, “sin restricción y con plena libertad, decirnos lo que teníamos que decirnos, defender lo que es defendible y aceptar hasta los errores. Si todos tienen esa conducta, serán altamente positivos”.
“Aspiro que en el mes de marzo podamos, no solamente proponer al Pleno la ley, sino votar y tener votos suficientes. Sería un retroceso no aprobar esta ley y quedarnos con la mordaza que hoy día nos rige”, sentenció.
Finalmente, el Presidente de la Función Legislativa reiteró la necesidad de transformar y hacer justicia con la situación del espacio radioeléctrico, especialmente para superar los errores cometidos en la concesión ilegal de frecuencias de radio y televisión, a fin de democratizar su entrega a favor de los sectores comunitario, público y privado.
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