En la sesión del Pleno de la Asamblea Nacional parlamentarios de diversos movimientos resaltaron la importancia de las reformas a la Ley de Defensa Profesional del Artista que data de 1979, considerando que contiene las aspiraciones de este sector, ya que garantiza sus derechos laborales.
En el debate la legisladora Betty Carrillo señaló que el Ministerio de Cultura debe tomar acciones en la gestión de la Federación Nacional de Artistas Profesionales que ha marginado a los artistas populares, a la vez que dijo que es necesario aclarar los requisitos para la validez del contrato y las condiciones de la prestación de servicios.
De su lado el legislador Gastón Gagliardo mencionó que los contratos escritos con los artistas deben establecerse a partir de una remuneración básica unificada y que se debe aprovechar las pantallas de cine y televisión de las empresas públicas y privadas para promocionar a los artistas nacionales
Magaly Orellana sugirió que el Ministerio de Cultura levante un registro de artistas por género y en lo relacionado con los contratos de trabajo de los artistas se elimine del artículo 5 del proyecto el término verbales y se mantenga que los contratos de trabajo podrán ser escritos.
Entre tanto, el legislador Fernando Bustamante precisó que el artista nacional no debe ser la piedra en el zapato de otros, al cuestionar la reserva del 50% en los espectáculos.
De su lado el parlamentario Esteban Melo solicitó que en la normativa se considere a los artistas ecuatorianos que se encuentran en el exterior, al tiempo de sostener que se requiere armonizar estas reformas con la de Ley Culturas.
Así mismo, el parlamentario Fabián Solano al referirse a la rectoría del Ministerio de Cultura señaló que es fundamental el otorgamiento de becas para capacitar al artista en el exterior, cuyo concurso debe promover el Ministerio.
José Moncayo, propuso que la comisión dé paso a las intervenciones de todos los artistas que lo hacen de diferentes maneras como por ejemplo el artista popular que debería ser capacitado por el Estado, para promover su desarrollo. Dijo que el tema de los artistas debe estar enmarcado en la Ley de Culturas
Entre tanto, el asambleísta Gilberto Guamangate subrayó que la afiliación de los artistas no debería ser voluntaria al preguntarse qué va a pasar con los artistas de los pueblos y comunidades y los eventos para aficionados. Por ello pidió que la propuesta debe ser socializada y trabajada en las provincias, para que el conglomerado realice sus propuestas.
Raúl Auquilla señaló que la propuesta no debe discriminar a ningún artista nacional o extranjero, por ello pidió que se reforme el inciso segundo del artículo seis.
Por su parte, el legislador Félix Alcívar recomendó que se defina con claridad qué es lo que se quiere regular, si es la relación laboral o la defensa de la actividad artística, mientras que Rocío Valarezo propuso que se clarificar si los contratos que se firman son civiles o laborales. Presentó observaciones sobre sanciones a los empresarios incumplidos y sobre la seguridad psicológica. La parlamentaria Rosa Elvira Muñoz enfatizó que el Ministerio de Cultura debería categorizar a los profesionales y a los artistas populares.
La presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, recordó a los parlamentarios que pueden presentar sus observaciones por escrito, a fin de que la Comisión de Educación pueda preparar el respectivo informe para segundo debate.
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