El ministro de Defensa Nacional, Javier Ponce Cevallos, en su comparecencia ante
“Desde el ministerio se ha llevado a cabo una política de defensa que se inscribe en una nueva cultura de paz y seguridad, que no tiene como punto de partida un Plan de Guerra como era en el pasado, sino una planificación que articula lo institucional con lo operativo, que está constituido por dos tipos de planes, uno de Defensa Externa y otro de Defensa Interna”, aseguró, al rebatir la afirmación del denunciante (Fausto Cobo) en el sentido que el Plan de Guerra Cenepa 1 es el que estuvo vigente a la fecha del ataque de Colombia en Angostura, mismo que no se había actualizado.
En este sentido, aseveró que sí existe un Plan de Defensa que ha sido actualizado en dos oportunidades, en junio de 2007 y diciembre de 2008, que pone énfasis en un plan de vigilancia, control y defensa, para lo cual precisamente se llevaron adelante algunas estrategias, entre ellas la adquisición de aviones no tripulados y de los helicópteros Dhruv, dentro de un proyecto de fortalecimiento de la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas, que había sido reclamado desde hace más de una década.
Explicó que la prioridad para el actual Gobierno son los seres humanos y que para ese objetivo se realizó la adquisición de los helicópteros que debían ser utilizados en actividades de control de la frontera norte, rescate de víctimas de desastres, transporte aéreo hospitalario, entre otras acciones de apoyo a la población civil.
El secretario de Estado añadió que una cosa es desarrollar una política de defensa de la soberanía nacional y la seguridad, que guarde una proporcionalidad entre los medios existentes y la capacidad productiva del país y otra emprender en una competencia con nuestros vecinos, en una verdadera carrera armamentista.
Se cumplieron los términos del contrato
En torno a la contratación para la compra de 7 helicópteros Dhruv, indicó que la decisión fue tomada por la ex Junta de Defensa Nacional y que el ministro por sí solo no podía suspender ni dejar sin efecto, más bien y luego de lo ocurrido en Angostura, impulsó esta compra, con sujeción a los términos establecidos en las bases del concurso y en el contrato.
Ponce Cevallos subrayó que no existe contradicción alguna entre las especificaciones del Anexo E de las bases del concurso y lo establecido en el contrato, porque la obligatoriedad de que sean helicópteros de año de fabricación 2008 en adelante corresponde a estos aparatos y todos sus componentes, exceptuándose los motores, que técnicamente no son considerados como componentes, que se especifica deben ser nuevos, sin uso anterior, de origen francés.
Respecto de las certificaciones, no se trata de que los organismos especializados de norteamérica, en el un caso y Europa, en el otro deben extender un certificado de aeronavegabilidad, sino que son certificaciones extendidas por los países donde se construyen los aparatos con estándares FAR y JAR, respectivamente.
Finalmente, aseguró que hasta mayo de 2011 se concluye el proceso y en ese tiempo se puede corregir cualquier entredicho que exista al respecto.
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