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En la Comisión de Justicia y Estructura del Estado, Gustavo Jalhk, presidente del Consejo de la Judicatura, presentó su informe sobre la aplicación de la figura jurídica de error inexcusable, utilizada para sancionar a jueces con observaciones.
La autoridad argumentó con datos y gráficos el trabajo bajo esta norma de la institución a su cargo, respetando el debido proceso, explicó. “Este año 2017 se presentaron 360 quejas, pero solo 5 tuvieron responsabilidad. De 2.083 jueces que existen en el país, tan solo 5 fueron destituidos por error inexcusable; se trata del 0,2 %”.
Jalhk aseveró que ciertos jueces que hoy pretenden aparecer como defensores de la transparencia y ética fueron sancionados y destituidos por actuar en contra de norma expresa. Enfatizó que la Judicatura ha cumplido, a cabalidad, sus funciones específicas, determinadas en el Código Orgánico de la Función Judicial.
Según el titular del Consejo de la Judicatura, un grupo de 14 abogados de la institución analizan este tipo de actuaciones con base en un procedimiento disciplinario. Es necesario consolidar la seguridad jurídica básica y elemental para evitar que crasos errores dejen en la indefensión a la ciudadanía, violenten derechos que producen daños y generen impunidad.
Citó el caso de María, una niña de 8 años del sector de Los Ríos, quien fue violada por su abuelo paterno, para quien el juez dictó orden de prisión preventiva y luego medidas sustitutivas fuera de audiencia, a pesar de las pruebas y evidencias presentadas. El procesado se dio a la fuga y se dedicó a amenazar de muerte a la menor y a su familia, quien tiene ya su niño de 3 años y no recibe pensión alimenticia.
También mencionó que Clara, en Cuenca, tuvo una hija fuera del matrimonio, ante lo que la esposa del padre de su niña la amenazó de muerte y posteriormente apareció asesinada. En las investigaciones se hizo una triangulación de llamadas entre la esposa, Clara y los sicarios. Sin embargo, el respectivo juez declaró el sobreseimiento definitivo de los procesados.
Por tanto, “el error inexcusable ha servido para analizar y sancionar, de forma severa y rigurosa, el cometimiento de faltas graves por parte de jueces que han actuado en contra de norma expresa y que dejan en mal predicamento la administración de justicia”, sostuvo.
Preocupaciones
El asambleísta Luis Fernando Torres, representante de Tungurahua y vocal del Consejo de Administración Legislativa, expresó que hay preocupaciones de las Naciones Unidas, de la Corte Interamericana y otros organismos internacionales que vigilan los procesos judiciales sobre las alegaciones de cómo se ha aplicado el error inexcusable. Es más, el Defensor Público, en la motivación de su propuesta de reformas al Código de la Función Judicial, sostiene que el error inexcusable se ha utilizado por parte del Consejo de la Judicatura para generar una especie de terror judicial, a fin de garantizar que no haya afectación alguna al proyecto político que ha gobernado desde hace 10 años.
Franklin Samaniego, vicepresidente de la Comisión de Justicia y legislador por Pichincha, opinó que el error inexcusable es, sin duda, un elemento que se ha encaminado a afianzar el tema de la eficiencia en materia judicial y una respuesta que la ciudadanía se merece en la garantía de sus derechos.
“No discuto la pertinencia de la figura, más aún cuando están claras las competencias del Consejo de la Judicatura, dadas incluso en consulta popular. Pero existen dudas en cuanto a su aplicación”, dijo el parlamentario Henry Cucalón, oriundo de Guayas.
“Mejorar la normativa para evitar cualquier discrecionalidad, que es sinónimo de arbitrariedad, será bueno para el ordenamiento jurídico ecuatoriano, el Estado y los ciudadanos”, precisó.
Cucalón habló de la necesidad impostergable de aclarar la situación de supuesta interferencia de cierta función del Estado en la justicia. A este criterio se le sumó la asambleísta Encarnación Duchi, quien manifestó que es urgente responder claramente el hecho de que la elección de jueces haya sido acorde al color de un determinado movimiento político.
Lira Villlalva, Asambleísta por Tungurahua, consideró que el error inexcusable evita la impunidad y constituye una herramienta efectiva en el combate a la corrupción.
