Dirigentes de organizaciones del deporte de varias provincias acudieron al Pleno de la Asamblea Nacional a exponer los problemas que enfrentan por falta de apoyo de parte del Gobierno y a demandar la asignación del presupuesto respectivo, que permita a los deportistas continuar con su formación y las prácticas.
Vinicio Chávez, presidente de la Asociación de Taekwondo de Chimborazo, advirtió que el deporte tiene serios problemas como consecuencia de la reducción del presupuesto, lo que contrasta con el incremento de la burocracia en el Ministerio del Deporte.
Tras advertir que el Ministerio ha optado por cerrar las direcciones de las zonas 2 y 3 en perjuicio de los deportistas, manifestó que invertir en el deporte es invertir en salud, en formación y seguridad para lograr un mejor vivir.
“El Ministro del Deporte no da una explicación clara y precisa del recorte del presupuesto; los resultados deportivo alcanzados en este momento responden a un trabajo e inversión muy fuerte en años anteriores”, enfatizó. Ante la falta de recursos y apoyo de parte del Gobierno, nuestros deportistas se ven obligados a realizar rifas y a buscar auspicio particular para continuar su preparación, reiteró.
De su lado, Marco Bonito Palacios, presidente de la Federación de Ligas Barriales y Parroquiales de Morona Santiago, manifestó que han acudido varias ocasiones al Ministerio del Deporte para exigir atención a los problemas, pero que lamentablemente no tienen respuesta.
Advirtió que las federaciones provinciales, barriales y parroquiales no tienen asignaciones presupuestaria para la implementación deportiva, pago de arriendo y servicios, por lo que los deportistas no pueden desarrollar sus prácticas de manera adecuada.
Daniel Onofa Cárdenas, político guayaquileño y representante de una microempresa, miembro de la bancada de la Izquierda Democrática, integrante de la Comisión Especializada Permanente del Derecho a la Salud y Deporte. Se caracteriza por su sencillez con humanismo, es por esto que sus proyectos van enfocados hacia las personas más vulnerables y a los microempresarios del Ecuador.
