Hoy, un día después de la consulta llevada a cabo en el recinto Las Golondrinas, comparto las siguientes reflexiones, como representante de Esmeraldas ante el Parlamento ecuatoriano, tierra a la que llegara Bartolomé Ruiz en 1526, el mismo año en que España concede la primera licencia para introducir esclavos africanos en Cubagua, y que fue uno de los procesos esclavistas mas vergonzosos y hasta entonces desconocidos en lo que hoy se denomina América; Continente en el que se desconocía el concepto de pobreza y que llega de manos de la civilización europea, como lo recogen las primeras crónicas enviadas a España.
Por el naufragio en 1533 de un barco cargado de hombres cautivos que iban a ser vendidos como esclavos, desembarcan en estas tierras los primeros africanos quienes convirtieron en imposible el dominio español. Lo que se transforma en una impronta única, legado de lucha desarrollado con los pueblos originarios con los que pronto compartieron ruta y explica la respuesta que nuestra Provincia dio, siglos mas tarde, ante la muerte de Eloy Alfaro el 28 de enero de 1912. Esmeraldas triunfó, y en ella la humanidad entera, al nunca entregar su libertad, como bien diría Simón Bolívar: “dios da la victoria a la constancia”.
¿Cómo debemos entender la constancia?. Participé de interminables caminatas, rendición de cuentas, audiencias ante autoridades, sesiones, etc. En pos de un resultado favorable a nuestra Provincia. Más allá de las diferencias políticas, conozco y me consta que otras autoridades locales y provinciales también lo hicieron, era razonable pensar que en virtud de la gratitud y las razones geográficas conocidas de ese pueblo el resultado electoral sería favorable. Entonces, ¿qué falló?. Si no se reconocen las debilidades, si no se detectan las fallas y se corrige con inteligencia y rapidez, quizá volvamos a tener resultados similares ante desafíos comparables a éste que nos arrebata Las Golondrinas. ¿Por qué perdemos dos consultas populares?. ¿Por qué Manabí con una población de aproximadamente 1.370.000 ganó una consulta popular en La Manga del Cura a pesar de enfrentarse a Guayas que tiene una población aproximada de 3.650.000 habitantes?.
No son preguntas con respuestas fáciles. Un viejo político ecuatoriano solía decir que las preguntas no son, sino las respuestas las impertinentes. Quisiera dejar al lector reservadas las respuestas, sin embargo deseo ensayar dos que las considero principales:
1. Las autoridades provinciales manabitas asumieron su rol buscando la unidad desde el principio, la Prefectura en lugar de ponerse a pelear con el gobierno central, alcanzó importantes niveles de coordinación con este lo que significo un destacable desarrollo vial en la Provincia.
2. En el caso esmeraldeño sucedió todo lo contrario, en lo que se refiere a la coordinación entre los niveles de gobierno, la permanente campaña de insultos y diatribas montadas en contra del gobierno central por parte de quienes por más de una década gobiernan la Provincia, confundiendo su rol le han pasado una altísima factura a Esmeraldas en cuanto al desarrollo y a la integridad de su territorio. Los expertos en temas electorales coinciden, casi unánimemente, en que para ganar una elección se requiere generar una ilusión, una motivación movilizadora y eso, es justo lo que no ofrece el gobierno provincial de Esmeraldas. Quizá quepa aquí otra pregunta: ¿por qué en el sector de Las Golondrinas el Gobierno provincial no puso un solo metro de asfalto?. No me refiero a la vía Quinindé–Las Golondrinas, sino más bien a otros caminos vecinales de ese sector.
Para concluir, me pregunto: ¿cuáles son las razones por las que para llegar a Las Golondrinas se tiene que pasar por Buenos Aires, en donde sendos letreros advierten que es territorio de Pichincha?. Eso parece ilógico, pero es real. ¿Quiénes llegaron a esos acuerdos?, ¿por qué se permitió llegar a la consulta cuando existen procedimientos amistosos, negociación directa, mediación territorial, incluso arbitraje territorial entre los GADS, y si hubo grandes dificultades porque no se llamo a todas las autoridades provinciales para afrontar esto?.
Entonces, la constancia de la que habló Bolívar fue lo que les faltó a nuestros representantes de la Prefectura, una pena.
Lo único bueno de todo esto, es que seguimos todos dentro de un mismo Ecuador, al que habrá que continuar construyendo y cerrando sus heridas, atendiendo las necesidades de nuestros pueblos, dando respuesta a sus aspiraciones y reclamos, en paz, en democracia, con profunda convicción humanista, labrando cada día el buen vivir que por derecho constitucional nos corresponde, enfrentando los desafíos con firmeza e inteligencia.
Gabriel Rivera.
