Por unanimidad, en el Pleno de la Asamblea Nacional ratificamos el “Convenio de Minamata sobre el Mercurio”. 14 países, incluido Ecuador, han adoptado esta herramienta jurídica para la protección de la salud humana y el ambiente frente a las emisiones de mercurio y sus compuestos, los mismos que son usados, principalmente, en la minería.
En este debate todos coincidimos. Por esta razón, con los 95 legisladores presentes reafirmamos este tratado internacional, acordado en el 2013 en Japón, que plantea hasta el 2020 la erradicación definitiva del uso de este metal. Estamos seguros que la aprobación de este tratado internacional constituye un importante paso para profundizar los procesos de control.
Asimismo, es importante destacar que, como lo señaló la Comisión de Soberanía, Integración, Relaciones Internacionales y Seguridad Integral, el Convenio de Minamata no solo proporciona importantes herramientas para reducir las emisiones y liberaciones de mercurio en el ecosistema, sino, además, da pautas claras para la disminución progresiva de su extracción a nivel global.
A pesar de que, en el 2013, la reforma a la Ley de Minería de Ecuador señaló un plazo de dos años para la prohibición del uso de este metal, aún faltan acciones por cumplir. Se requiere un Plan Nacional Integral donde las instituciones con competencia en este tema generen información, investigación, alternativas al uso del mercurio, efectivo control del contrabando, tecnología más limpia, incentivos, remediación y reparación de las áreas contaminadas.
Por esta razón, revalidar este convenio demuestra una clara concordancia con los mandatos constitucionales relativos a los derechos de la naturaleza y el derecho a la salud. Esto es una importante señal de que en Ecuador tomamos los temas ambientales como ejes fundamentales de la transformación.
Sobre el Convenio Minamata
Alienta a que los países suscriptores intercambien información sobre esta problemática y determina que no se permitirá la exportación del mercurio o la fabricación, importación y exportación de los productos con este mineral añadido, con excepción de algunos productos como los destinados a la investigación.
En Minamata (ciudad japonesa), desde la década de los 50 se registran más de 2.900 casos de personas contaminadas por mercurio que presentan: debilidad, alteración sensorial en manos y pies y deterioro de los sentidos de la vista y el oído; en casos extremos, parálisis y muerte (se registraron 111 casos).
Según estadísticas locales, hay 80.000 personas expuestas a altos niveles de mercurio en las zonas mineras de las provincias de El Oro y Azuay que también pueden correr estos riesgos en su salud.
Asambleísta por la provincia de Guayas | Integrante de la Comisión De los Derechos Colectivos Comunitarios y la Interculturalidad | Visita mi Perfil
