El jueves 11 de diciembre la Asamblea Nacional aprobó con 77 votos la Ley de Gestión de la Identidad y Datos Civiles. Una vez publicada en el registro oficial, esta dará paso a la creación de la Dirección Nacional de Gestión de la identidad y datos civiles en reemplazo del Registro Civil, y del Documento Nacional de Identidad en lugar de la cédula, que incluye algunos cambios importantes.
Esta ley representa un nuevo momento en el proceso de modernización técnica y administrativa de la entidad, pero también un gran paso hacia la progresión de derechos para todas y todos, pues se desprende de la lógica patriarcal dominante en temas de género fundamentales, entre los cuales se destaca la posibilidad de que los niños y niñas lleven primero el apellido de la madre, previo consenso entre la pareja.
En ese sentido, también permite que voluntariamente, al cumplir la mayoría de edad y por una sola vez, la persona por autodeterminación sustituya el campo sexo por el de género que puede ser: masculino o femenino. En ese caso, el peticionario podrá solicitar el cambio en los nombres a causa de la sustitución del campo sexo por el de género.
Durante el debate estuvieron presentes representantes de 18 organizaciones LGBTI que conforman el Pacto Trans, quienes expresaron su satisfacción por lo que consideran “pasos importantes” en la lucha contra la discriminación por razones de orientación sexual.
Cabe destacar que el cambio de sexo por género lo puede solicitar cualquier ciudadano o ciudadana mayor de edad, no es exclusivo para las personas transgénero, por lo cual no se trata de estigmatizarles con una cédula distinta sino de reconocer y garantizar, acorde lo establece la Constitución, su derecho a la autodeterminación.
Quiteña de nacimiento, se licenció en la Politécnica Salesiana en Ciencias de la Educación. Posteriormente estudió Ciencias Políticas en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, FLACSO. Militan..
