En julio del 2019, un grupo de hombres y mujeres que amamos el deporte decidimos unirnos para, como un solo equipo, empezar una carrera muy importante.
El grupo era especial: había ciclistas, andinistas, corredores de aventura, triatletas, futbolistas, tenistas e incluso empresarios. Y yo, por esta vez, ¡me ofrecí para ser el capitán!
Arrancamos, y debo confesar que la ruta se veía más exigente de lo planeado y que a pesar de que avanzábamos a buen paso, la meta parecía estar súper lejos. ¡Sin duda se trataba de una prueba resistencia!
El equipo se mantuvo siempre sólido, y actuó con estrategia. Esto nos dejó llegar triunfantes...¡LO LOGRAMOS!
¿Adivinan cuál era la meta? ¡Sí! El incentivo tributario a favor del deporte ecuatoriano.
Después de 15 meses de soñar, trabajar y luchar en equipo, finalmente tenemos reglas claras para que los deportistas de todas las disciplinas y niveles puedan acceder a más recursos para financiar sus entrenamientos, equipos, carreras, estudios entre otros. Y que, por su parte, la empresa privada que los apoya pueda beneficiarse de una doble deducción a la hora de declarar sus impuestos.
Este podio alcanzado es sólo una muestra de todo lo que podemos lograr cuando trabajamos en equipo. Ahora, el sueño es que dentro de pocos años podamos levantar con orgullo la bandera de Ecuador con más Carapaces, Tenorios, Lapenttis, Chitos, Dajomes, Morejones, Caicedos…
GANA EL DEPORTE ECUATORIANO, GANA EL PAÍS Y QUIENES APUESTAN POR ÉL
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Asambleísta por la provincia de Pichincha | Integrante de la Comisión Del Derecho a la Salud | Alianza SUMA
