Ciudadanos y ciudadanas:
Como les dije el día que me confiaron su voto, esta curul es de ustedes; de los tricimoteros de Pascuales, de los comerciantes informales, de mujeres, jóvenes, disidencias, de los vulnerables de Ecuador, de las personas de a pie. Mi cargo es de ustedes, los mandantes.
Mi compromiso siempre ha sido escuchar sus voces, luchar por sus derechos y trabajar incansablemente por mejorar sus condiciones de vida. Por eso, he dado mi voto por el adelanto de elecciones y despojarnos todos los asambleístas de nuestros cargos.
Esta decisión la he tomado con la firme convicción de que, como representantes del pueblo, debemos estar dispuestos a escuchar y actuar según las necesidades de quienes nos eligieron. El adelanto de elecciones es una oportunidad para renovar nuestro compromiso con la democracia y permitir que ustedes, ciudadanos y ciudadanas, decidan nuevamente quiénes serán sus representantes en la Asamblea Nacional y en la presidencia de la república.
Estoy convencida de que juntos podemos construir un Ecuador más justo y equitativo, donde todas y todos tengamos las mismas oportunidades. Continuaré luchando por ustedes, por sus derechos y por un futuro mejor para nuestro país.
Soy Victoria Desintonio, Asambleísta por la provincia del Guayas, de la Bancada Ciudadana. Soy defensora de los derechos de la mujer y sus reivindicaciones. Busco la generación de oportunidades para todos y todas. Tengo treinta y cinco años, mi compañero de vida es John y soy madre de Ezequiel y Rafael. Desde joven, decidí luchar por la eliminación de las causas de la desigualdad y la injusticia
A los diecisiete años me vincule al Movimiento Jubileo 2000. Participé en el impulso a proyectos de formación sobre el tema de la deuda, en la construcción de normativas para el control del endeudamiento público y veedurías, y en el impulso de iniciativas de vigilancia ciudadana a la deuda externa ecuatoriana.
He participado intensamente en el movimiento de mujeres, donde he compartido nuestras luchas por los derechos humanos. Me vinculé al proceso de la Asamblea Constituyente de 2008, en particular en la creación del Mandato Juvenil Constituyente, desde el Acuerdo Nacional de Jóvenes. Ese momento marcó mi vida, pude valorar desde la realidad, la importancia de la participación. Esta iniciativa ciudadana, plasmó los anhelos y demandas de jóvenes ecuatorianos en la nueva Constitución, que siento mía.
Fui consejera del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, designación que obtuve a través del voto popular.
Fui asambleísta desde mayo de 2021, hasta la disolución de la Asamblea por muerte cruzada en mayo de 2023. En la Asamblea, propuse la derogatoria de la mal llamada Ley Humanitaria, que precarizó el trabajo de miles de ecuatorianos y ecuatorianas.
Vuelvo a la Asamblea Nacional para construir ese Ecuador que represente igualdad y equidad para todos y todas.
