La Comisión de Derechos Colectivos continuó el estudio del proyecto de reformas a la Ley de Comunicación. Esta vez escuchó a los dirigentes de la Federación Nacional de Periodistas (Fenape), Fundamedios y Ciespal, quienes presentaron varios comentarios y observaciones a las propuestas.
Susana Piedra, presenta de la Fenape, sugirió la eliminación total de la figura del linchamiento mediático, argumentado que ha servido para perseguir a medios de comunicación y periodistas, al enfatizar que la normativa tiene que guardar concordancia con los estándares internacionales, tratados y sentencias de los organismos de los cuales nuestro país es suscriptor.
Reiteró que la comunicación es un derecho humano no un servicio público y que los periodistas cuentan con un Código de Ética, la Ley de Ejercicio Profesional, por lo que no tiene sentido un código deontológico.
Además planteó que la ley garantice la vida y el trabajo de los obreros de la comunicación, que los medios contraten seguros de vida para quienes se trasladen a coberturas en sitios de conflicto, que se mantenga la obligación de la profesionalización.
César Ricaurte, presidente de Fundamedios, sostuvo que la ley debe guardar respeto a los estándares internacionales, ser lo más sencilla, simple y comprensible. Debe ser un cuerpo marco que apunte a la integralidad del sector y consagre la absoluta libertad de expresión, subrayó.
A su criterio, el Consejo de Regulación y Desarrollo de la Comunicación (Cordicom) tiene que convertirse en el organismo regulador, sujetándose a estándares mundiales, actuar con independencia, alto nivel técnico y representar a todos los sectores de la sociedad.
La democratización de la comunicación debe ser el eje primordial de la reforma, tomar en cuenta que la regulación de los medios se tiene que hacer desde un aspecto mucho más académico e investigativo, sin sanciones pecuniarias, según Gissela Dávila, de Ciespal.
Es clave implementar un seguimiento al trabajo que se hace, bajo el entendido que por las características del ejercicio, los medios y periodistas pueden cometer errores que afecten derechos, por lo que se hace indispensable un espacio para apelar, revisar y capacitar sobre el tema, señaló.
Por último, llamó a fortalecer las acciones afirmativas para medios comunitarios dentro del proceso de redistribución de frecuencias y evitar la concentración de medios en pocas manos.
MG/pv
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