El Grupo Parlamentario por los Derechos de los Pueblos y Nacionalidades analizó en un foro las reformas planteadas en la Ley de Comunicación, enviadas por el Ejecutivo y diversos organismos, entidades y personas que propusieron modificaciones a ese marco legal.
Las reformas a la Ley de Comunicación se trabajaron durante dos meses, tiempo en el que se avanzó en el debate de 80 artículos aprobados, de los 140 que actualmente tiene la ley. Se prevé que el informe para primer debate esté listo en la primera semana de septiembre. Luego se recibirán las observaciones de los asambleístas. Existen más de 500 de diferentes grupos y gremios de comunicación.
Mauro Cerbino, académico de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) criticó a los medios de comunicación privados, porque considera que no son los garantes de una adecuada y libre expresión. Asegura que se entretienen en asuntos mediáticos y no en puntos neurálgicos de la Ley.
Para Cerbino, lo importante en una ley de comunicación en un país como Ecuador, es el hecho de que el Estado tiene un doble rol. Debe pensar en un paisaje mediático históricamente ocupado por el sector privado que hizo de un bien común, como el espectro radioeléctrico, un negocio.
En este nuevo contexto político, señala Cerbino, retorna el intento de hacer negocio con la comunicación y cree que esto no se puede permitir, porque se debe reclamar del Estado un doble rol.
Pueblos ancestrales
Apauqui Castro, de los Pueblos y Nacionalidades Indígenas instó a tener una comunicación que cuide los intereses y derechos de los pueblos ancestrales y propuso una asignación directa de frecuencias para medios comunitarios de los pueblos y nacionalidades, la creación de un fondo de fomento para medios comunitarios y mantener la distribución del 34 % del espectro electrónico para medios comunitarios.
Para Castro, es importante la apertura de concursos de frecuencias para medios comunitarios cuando las comunidades y organizaciones los soliciten. Planteó la eliminación de la exigencia de títulos para las personas que laboran en medios comunitarios.
RD
