El proyecto de Código de la Salud (COS), no es la excepción en la construcción participativa de las leyes trabajadas en la presente administración. Es fruto de una amplia y abierta convocatoria al diálogo y al debate con la intervención de voces de los diferentes sectores. Además, incorpora más de 20 proyectos de Ley.
Su análisis inició en el 2012, con el texto presentado por los asambleístas Víctor Quirola y Carlos Velasco. En 2016, el parlamentario William Garzón presentó un texto que compila el trabajo de cuatro años de la Comisión de Salud; e, inició un nuevo proceso de debate y construcción participativa.
El análisis y aprobación del informe para primer debate, se hizo por Libros. El 11 y 12 de mayo de 2017 fue el primer debate en el Pleno de la Asamblea.
La Asamblea, recibió los proyectos de Código Orgánico Integral de Salud; y, Ley Orgánica de Lucha Contra el Cáncer, esta última, de iniciativa ciudadana, respaldada por 111.000 firmas. Ambas, incluidas dentro del proceso participativo de construcción del COS.
El 20 de diciembre de 2018, con el voto de ocho asambleístas, el organismo Legislativo, aprueba el informe para segundo debate del Código Orgánico de Salud.
Socialización
Para su socialización, la Comisión del Derecho a la Salud, realizó más de 12 talleres; cinco sesiones en territorio y 50 en sitio; 53 comisiones generales de las organizaciones de la sociedad civil y ciudadanía en general; 22 autoridades de instituciones públicas; ocho del sector privado. Además, 32 asambleístas formularon observaciones.
Previo a la elaboración del informe para primer debate, realizó (entre 2012 y 2016) un amplio e importante proceso de socialización del texto, y recibió aportes, comentarios, observaciones de diversos sectores de la sociedad que, en gran parte, se recogieron en el texto borrador del articulado para segundo debate.
Es así que incorpora el derecho a la salud como componente esencial en todas las políticas públicas en las que tenga incidencia; y, garantiza a todas las personas y, de modo especial, a los grupos de atención prioritaria, el derecho a la salud y a la atención integral e integrada que incluirá el acceso a medicamentos y al uso racional de los mismos.
Sobre el Sistema Nacional de Salud, se recogieron las observaciones de varios de los salubristas; las preocupaciones de los actores públicos y privados respecto del financiamiento para el Sistema Nacional de Salud. Para ello, reformuló el capítulo de tal manera que se respete la autonomía de los aseguradores públicos.
Recoge las preocupaciones de algunos actores en torno a las sanciones, las clarifica y reordena, a fin de guardar la correcta proporcionalidad entre la falta y sanción administrativa.
Mantiene la garantía de acceso a medicamentos de calidad, seguros, eficaces y de calidad; eleva a categoría de ley el tema de etiquetado de alimentos, lo cual permite a los ciudadanos hacer elecciones informadas sobre sus hábitos de consumo de alimentos y esto como puntal de la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles.
El documento, según lo anunciado por la titular de la Legislatura, Elizabeth Cabezas, será puesto a consideración de la agenda del Pleno, luego del receso legislativo.
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